Además al ganador se le regalará la biblia del buen recolector (anglosajón): Food for Free. Y para poneros los dientes largos hago una traducción libre de algunas partes de la introducción de este interesante libro:

Si los aumentos en producción de las verduras, frutas y horatalizas han tenido como consecuencia el detrimento del sabor de los mismos, aquellos antiguos sabores robustos están aún ahí para el disfrute de aquellos que queramos buscarlos.
La comida silvestre, (o wild food denominada por los anglosajones ) trata de consumir estas plantas, como fueron y pueden ser utilizadas como comida. La comida silvestre conlleva un cierto halo de aventura de descubrimiento. Sus sabores y texturas nos sorprenderán a la gran mayoría, pero también, la realización personal de poder haber extendido nuestras experiencias de sabor mas allá de los límites que nos han impuesto los cultivos y la producción en masa. Hay una galaxia de poderosos y sorprendentes sabores conservados de manera intacta en el "almacén" silvestre de nuestros campos, costas y montes.
- nunca arranquéís las plantas enteras. Tomad trozos de varios especímenes, tratando de no matar la planta, para que pueda seguir produciendo. Es útil llevar una navaja o tijeras.
- tratad de no llevaros las semillas, sobre todo de plantas anuales, de manera que puedan volver a germinar al año siguiente. Si recogeis setas, nunca uséis bolsas plásticas, usad cesta, para que las esporas caigan al suelo. Tampoco uséis rastrillos ni utensilios que perturben el habitat.
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